Descripción
El diente de león, conocido como achicoria amarga, crece al borde de campos y jardines, y se caracteriza por sus características hojas dentadas y flor amarilla.
La mayoría de personas, desconocen que esta planta es comestible.
Las hojas tiernas, las podremos añadir en ensaladas, tortillas o incluso hacer una salsa pesto con ellas, mezclándolas con otras plantas como la albahaca o la rúcula. Conviene destacar que su sabor es un poco amargo, que es precisamente el que confirma sus propiedades para el hígado, por lo que no lo añadiremos en gran cantidad.
Sus Flores, antes de que abran se pueden encurtir en sal y vinagre como ocurre con las alcaparras. Se pueden freír o añadir frescas a las ensaladas.
Cuando la planta tiene 2 o más años se puede cortar una parte de su raíz, tostar y utilizar como un sustituto de la cafeína para hacer infusiones.
El diente de león tiene propiedades diuréticas ayudando a eliminar líquidos y evitar su retención. Sus raíces, tostadas y molidas, pueden funcionar como un sustituto del café, sin cafeína ni estimulantes.